¡ CRISTO LLEGÓ A LA FALDA !

...Era una noche fría y húmeda, un viernes de cuaresma, los faldenses estaban durmiendo, cuando Cristo vino a La Falda; en la Curva de la Vida lo recibieron con adoración las hermanas y los hermanos del Centro Cristiano de vigilia. Ya había venido otras veces durante las campañas, trayendo paz, gozo, risas que hacían deslizar a los varones de las sillas y las chicas quedaban tendidas en el piso por media hora (y nadie había tomado nada); pero esta vez decidió establecerse permanentemente. “Ya sé (dijo Jesús), como siempre dirán que estas obras no las hizo mi Padre sino el enemigo, mas no importa, reciban estos dones que les traigo”.
Recibieron también, un nuevo entusiasmo de vivir (se recargaron las pilas), bendiciones que resolvieron problemas familiares, de trabajo, económicos, de salud y sanación interior. ¿Y las otras congregaciones evangélicas? Apenas dejan moverse al Espíritu Santo entre ellos, y tildan de locos a los que hacen algo fuera de lo usual; pero se arriesgan a quedarse en la tibieza de la iglesia de Laodicea, en Apocalipsis.
Desde este verano pasado los hermanos y las hermanas decidieron salir todos los martes a la noche a la plaza, a orar y clamar, con el fin de que se rasgasen los cielos y toda La Falda recibiera a Cristo. Invité a compartir este sentir a los luteranos, mas en la plaza los únicos que se vieron fueron unos chicos tirando piedras. Una vez fue una hermana católica mariana, turista de Capital Federal, que volvió gozosa a Buenos Aires con Cristo en su corazón. La había encontrado un día en la Capilla del Sagrado Corazón, mientras preguntaba por el grupo “Maranatha”, que todos los miércoles a la tardecita se reúne para orar y alabar al Señor. Unos hermanos y hermanas carismáticas que quieren renovar, con los dones del Espíritu Santo que los visita suavemente “como en la orilla la resaca del mar lame la arena”, la vieja y decrépita Iglesia Católica (así ha ocurrido el pasado día de Pentecostés - a 50 días de Pascuas-).
Ni hablar de los Testigos de Jehová; visité el Salón del Reino que parece una salita de espera de Alitalia en un aeropuerto italiano; ¡pero no esperan ninguna aeronave con destino al Paraíso! Además no tomarían vuelos de otras compañías, pareciera que prefieren quedarse en tierra para perdición de las almas; otros descenderían de la Jerusalén Celeste para repoblar aquel Reino que ellos mismos proclaman. El Paraíso (o Edén reinstaurado en la tierra).
Me acerqué también a los gnósticos-cristianos, ellos se las saben todas, creen tener la gnosis (sabiduría, conocimiento / Más aún si en la propaganda de los cigarrillos saben edificar una casa alrededor de un árbol, los sabios ecológicos talan cinco pinos seculares para edificar un templo), y piensan... “¡¿por qué tener que meterse con los ignorantes?!”. Para que no entre allí aquél que usan como adjetivo (Cristo), pusieron una enorme puerta de madera maciza al ingreso del “monasterio”.
Y mientras los mormones creen ser la única y verdadera “iglesia de Jesucristo (yankee) y de los santos de los últimos días”, la verdadera Iglesia de Jesucristo sigue sectorizada en distintas congregaciones cristianas (unas más bien heréticas), separadas por muros (‘The Wall’) que dividen a los hermanos en Cristo (‘divide et impera’ afirmaba aquel anticristo que era el emperador romano Nerón). Cayó el muro político del comunismo y ya está por caerse el muro que los religiosos hipócritas han levantado según las instrucciones de los “arquitectos” del diablo, ¡porque Cristo ha llegado!.
Y qué decir de los otros vecinos que parece prefieren quedarse encerrados en las cuatro paredes de casa (‘Another Brick in the Wall’) mirando quizás por un canal de cable al Falso Profeta (Sai Baba) que hace falsos prodigios y materializaciones al estilo de David Cooperfield (un vídeo de la CNN muestra claramente a un discípulo que, detrás de la espalda, le alcanza un objeto que después él va a “materializar”); estos hermanos se pierden las bendiciones de Cristo que tanto necesitan, y por falta de las cuales se quejan todo el santo día.
Hay otros que están dentro de las confiterías y de los boliches, tomando alcohol o algo peor, y tal vez buscando una pareja para pasar unas “horas felices”; ellos también se pierden la “borrachera” o éxtasis espiritual y el gozo en Cristo.
En fin, la elite cultural solo se moviliza para ir a ver y escuchar a un contactista boliviano o a un falso maestro filoinduista que proclama verdades a medias, confundiendo aún más el asunto.
Si hubiera llegado Enrique Iglesias habría miles de chicas gritando delante del escenario, o si hubiera llegado Madonna habría una cola de chicos que querrían estar en su presencia, mas solamente ha llegado, gratis, ¡nada más y nada menos que el Cristo!.
El aquí tiene un gran pueblo que lo ama, varios ‘fans club’ que se reúnen por él (orando y cantando sus canciones), pero que no saben todavía que él ya llegó a La Falda; y quizás lo siguen esperando. Así que los dejo con esta inquietud: Cristo llegó a La Falda, y quiere brindarle su Amor, pero... ¿La Falda llegó a Cristo?

¡La Gracia y la Paz del Señor sean con Uds.!

firma.jpg (5465 bytes)

Posdata: Mi Dios no es un Dios muerto: ¡Resucitó, él vive! y no terminó de hablar a su pueblo, ni antes de subir a la cruz, ni apareciendo a los apóstoles después de la resurrección, ni con la revelación (Apocalipsis) enviada al apóstol Juan, en la Isla de Patmos, en el primer siglo de la era cristiana; sino que sigue hablando a su Iglesia con los profetas modernos. “Díjole Jesús (recién resucitado, al escéptico apóstol Tomás): "Porque me has visto, has creído? Bienaventurados los que sin ver creyeron". (Juan 20:29) - (Escrito y recopilado bajo la supervisión del Espíritu Santo y... no temas... Mateo 10:27-31; Lucas 12:32; Hechos 18:9-10; Apocalipsis 2:10)

¡ C H A U !

Esto no es un volante de la: "Secta" para Desprogramar a las Víctimas de la Sectas.